Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

martes, 29 de septiembre de 2009

SOBRE UN AVISO.



El de la publicación del libro Impasible el Ademan, de Álvaro Romero, que ya está a la venta, bien a través de la Librería Barbarroja (a partir del próximo día 1 de Octubre), o poniéndose en contacto con el autor en su blog LA BALLENA ALEGRE.
El libro ha sido publicado por el metodo de la autoimpresion, de forma que Álvaro se tiene que hacer cargo de distribuirlo y enviarlo -aparte de la colaboración de Barbarroja- lo cual es un motivo más para felicitarlo: por el nacimiento de este hijo, y por el valor y la decisión de traerlo al mundo en tales circunstancias.
Enhorabuena, Álvaro. Y a quien lea, la recomendación de que lo compren; pero esa ya se daba por supuesta.

SOBRE IMPUESTOS Y ENCUESTAS.

La maravillosa, solidarísima y equitativa subida de impuestos del Gobierno de don José Luis Rodríguez, fue sometida ayer a una encuesta -vía web- por Antena 3 TV. El resultado fue de un 12% a favor de la subida y un 88 en contra.
Admitiendo todo lo que sea procedente acerca de la poca fiabilidad estadística -ciencia de por sí nada fiable- de este tipo de encuestas, donde participa el que está motivado para ello, no deja de llamarme la atención ese 12% favorable a la subida de impuestos.
Porque con la subida del IVA sólo pueden estar satisfechos los que tienen piso en propiedad y no necesitan hacerle ninguna reforma; los que tienen coche recién comprado; los que no utilizan transporte público; los que no pagan la gasolina de sus vehículos; los que no pagan el pan ni la leche; los que no pagan la carne ni el pescado; los que no pagan las naranjas ni los fideos; los que no pagan en los restaurantes -sean de lujo o sean la tasca de la esquina-; los que no compran libros -ni siquiera los de texto escolares-, ni tienen necesidad de más ropa, ni precisan gas, agua, electricidad, teléfono.
Sólo pueden estar satisfechos, en suma, los que tienen de sobra de todo, o los que ya están en la indigencia absoluta. Pero estos últimos no creo que dispongan de ordenador y de conexión a internet para votar en la encuesta referida, lo que hace suponer que los que han participado votando a favor, son los que ya andan sobrados. O, tal vez, los que tienen pagados todos los gastos.
¿Acaso ese doce por ciento son los directamente enchufados por el PSOE? ¿O sólo son tontos, irremisible, rematadamente y abismalmente tontos?

SOBRE EL MADRID OLIMPICO.

Todo el mundo que tiene mando en plaza -o plazuela, o plazoleta, o cuchitril con derecho a largar- y voz en radio, televisión y grabadora de prensa, dice que quiere que le caigan a Madrid las Olimpiadas del 2016.
Caigan digo, y lo digo porque mi opinión -a fuer de libre- es totalmente la contraria.
No quiero ni por asomo que en Madrid me metan más obras, obrillas y obruelas con la coña de las Olimpiadas; no quiero que los Juegos justifiquen más deuda municipal, ni más subidas de impuestos y tasas locales, ni más multas recaudatorias.
No deseo ni por casualidad que nos aplasten durante dos o tres meses con la seguridad de los mandamases que acompañen o visiten a sus atletas y, sobre todo, vengan a hacerse la foto y darse buena vida a costa de que cada vez que vayan a comer, cenar, tomarse el aperitivo o lo que gusten, nos tengan las calles cortadas hasta que pasen las caravanas de diez o doce coches de escolta por cada uno con percebe campanilludo dentro.
No me apetece ni por el forro quedar sujeto por lo que me quede de vida a las deudas que traerá la mala gestión, consustancial a nuestros demócratas pijoprogres, y ahí tienen la Exposición Universal de Sevilla, que aún la estamos pagando.
En definitiva, que no quiero que Madrid sea sede olímpica, que espero fervientemente que el señor Gay-ardón se traiga un hermoso NO de donde sea que haya ido a consultar el oráculo del COI, y que nos dejen en paz a los habitantes de Madrid.
Todo lo cual digo ahora, cuando faltan dos o tres días para el evento otorgante, para que nadie piense que toreo a comité olímpico pasado.

lunes, 28 de septiembre de 2009

SOBRE LOS NUEVOS INVERTEBRADOS.

Nada más y nada menos que 850 nuevas especies ha descubierto un equipo de investigadores australianos. Lo dice El Mundo, y aquí pueden ver algunos especímenes de insectos, pequeños crustáceos, arañas, y gusanos:


viernes, 25 de septiembre de 2009

SOBRE LA ULTIMA NOTICIA.



De fuentes generalmente bien informadas, acabo de recibir un aviso urgentísimo:


Tras recientes y profundas investigaciones, se puede afirmar que el capitán Rodríguez Lozano -abuelísimo de un tal Zapatero- no fue fusilado en la guerra por los fascistas, sino que se murió de vergüenza pensando lo que vendría décadas después.
Para incrédulos, véase Minuto Digital

SOBRE UNOS COMENTARIOS.

Los recibidos por mi ultima entrada, y que -según costumbre esporádica- traigo aquí para mejor lectura y respuesta.

* * *

soldado_vikingo dijo...
Joder, son incultos hasta para escribir.

* * *

Dicen que es que con las prisas utilizaron el corrector ortográfico y no corrigieron al corrector. Es posible, porque los correctores ortográficos habituales son los adecuados para estos cerebros. Y no digamos los gramaticales, que hace años desactivé porque no me entendía.

* * *

José Vicente dijo...
Buenas tardes, entro en este blog, por indicación de un amigo y es mi obligación el decir que coincido plenamente contigo. ¡Si! Coincidimos en varias ideas, la primera y más esencial es España,Si ¿España existe o no existe? Nacionalistas separatistas con el apoyo del gobierno ya la han roto, el domingo pasado en un pueblo de Cataluña hicieron un referéndum.
La segunda y no menos importante es, si nuestra cultura como nación es la cultura Cristiana y por lo tanto la religión católica, o es el decir Dios ya no existe, jóvenes hacer lo que os venga en gana, pero si tener respeto a los musulmanes porque ellos vienen de fuera y hay que respetar su religión, la católica no, la mora.Tercera, dar a conocer la figura y la obra de Francisco Franco, darla a conocer a jóvenes que en EGB como en ESO, han estudiado poco de historia, y lo que les han enseñado, no ha sido la maldad de la II Republica, la quema de Iglesias, la muerte y el martirio de Sacerdotes. ¡No! Eso no, les han dicho que Franco fue un asesino, y hay joven que me decía, pero que hacia Franco iba matando por los pueblos, envenenaba los pantanos, para que murieran los Españoles. Hay que decir quien fue Franco y su obra.
Y la cuarta decirte que estoy a tu disposición en mi blog feenmipatria.blogspot.com AMOR A ESPAÑA.
Un abrazo

* * *

Bienvenido a tu casa, José Vicente.
Difícil pregunta la tuya, sobre si existe o no existe España. Ganivet definía que España es un país absurdo y metafísicamente imposible.
Por mi parte, pienso que España sólo es posible de una forma que es la metafísica. España, como Imperio, fue un desastre. Y lo fue precisamente porque atendió más a la metafísica que al provecho y a los intereses propios. Un Imperio que -primero- concedió a los indígenas de América la condición de hijos de Dios y súbditos de la Corona, con más derechos de los que los sometidos a los ingleses pudieron jamás soñar. Un Imperio que -segundo- dejó sus mejores esfuerzos y sus mejores hombres en la defensa del catolicismo, en contra de sus propios intereses imperiales.
Ningún Imperio hubiera sobrevivido a estas dos cosas, de no ser por una existencia metafísica. Porque esa es la forma de existir España: la metafísica y católica. Si España deja de ser católica -no de forma meramente formal, que se mantiene, sino de manera moral, esto es, de las costumbres, que es la que cada día se pierde más- España dejará de existir. Y en ello estamos, muy hábilmente.
Me pregunto si el anticlericalismo decimonónico que nos venden como el último berrido de la modernidad progresista, no es sino un complejo de inferioridad que se explaya en la semianimalidad. Es más fácil gobernar a deficientes espirituales que a quien se sabe portador de valores eternos.
No son sólo los jóvenes los que ignoran la verdad sobre Franco, o los que mienten a boca llena sobre él. La mayoría de los que vivieron su época, callan como meretrices o mienten como bellacos, y nadie es capaz de decirle a los jóvenes que Franco -por ejemplo- no envenenaba pantanos, sino que los construyó. Y en todos ellos habrá una inscripción donde -aunque hayan quitado su nombre- permanecerá la fecha de inauguración. El último pantano construído en España se finalizó en 1976. ¿Quién lo mandó construir?
Tu blog me ha parecido espléndido y, con tu permiso, colocaré un enlace entre mis recomendaciones. No sólo está bien escrito, sino que ofrece una intetesantísima documentación para quien guste saber la verdad.
Un abrazo.

* * *

SPEER dijo...
Yo soy de Madrid y estoy felicísimamente casado con una vasca.La boda la celebramos en vascongadas. Con meses de antelación contratamos a unos "profesionales" de reportajes videográficos.Cuando nos dieron el DVD y nos pusimos a verlo, a cada secuencia le precedía unos títulos de crédito.En el pasaje correspondiente pusieron:HERMITA DE S9anTXfwkcAGA.
¡Unos profesionales de hacer videos de bodas!¡Con dos cojones!
SPEER dijo...
No soy grafólogo pero la firma estampada sobre MIXTO EZKER BATUA, me da amí que es de un sujeto........un tanto..... cómo decirte .....¿simple?

* * *

Magnífico titular para la secuencia de la boda. No cabe duda de que lo recordaréis siempre.
La firma del batúo más parece la media firma típica de los burócratas para el papeleo de trámite. Probablemente el fulano sea funcionario autonómico digital.

* * *
27 puntos dijo...
¡ Que tropa, Dios mío, que tropa !

* * *

Y estos son los cualificados representantes del pueblo...

* * *

Amador dijo...
Lo que hace el bilingüismo.
Por cierto, pido permiso para enlazarte en mi blog
Un saludo y enhorabuena por la página.
* * *

Gracias, Amador.
Lo de Izquierda Hundida será porque son conscientes de su situación.
Por supuesto, te agradezco el enlace y a mi vez me tomo la libertad de incluir el tuyo, que me ha gustado mucho.
Saludos.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

SOBRE LA CURA DEL SEPARATISMO.


Lo cuenta El País a propósito de una enmienda presentada conjuntamente por el PNV y Ezker Batua:
El texto, un breve párrafo de cinco líneas, recoge el verbo aprobar escrito con uve e inundaciones con una hache inicial. Además hay un error de escritura, ya que en lugar de poner "entorno" pone "entormo".
No recuerdo quien -¿tal vez Unamuno?-, decía que el nacionalismo se cura viajando. Probablemente el separatismo pudiera curarse aprendiendo a leer y escribir.

SOBRE LA ALIANZA DE ZAPATERIZACIONES.

Como no me gusta repetir una y otra -y otra, y otra- vez lo mismo, simplemente copio unos titulares de hoy mismo, que quien quiera puede comprobar en los correspondientes enlaces:

lunes, 21 de septiembre de 2009

SOBRE LA IMPROVISACION Y LA RESPONSABILIDAD.


Cuenta ADN -seguro que otros más fiables también, pero este es el primero en orden alfabético donde lo he encontrado-, que don José Blanco dijo ayer, en la Fiesta de la Rosa -¿la Rosa Díez- que "Donde ven improvisación, lo que hay es responsabilidad".
Vale. Y donde ven un capullo ¿qué hay? ¿Un Pepiño?

domingo, 20 de septiembre de 2009

SOBRE LA LEGION.

Hoy es 20 de septiembre, cosa que cada año suele ocurrir por estas fechas. Hoy es, también, el aniversario de la fundación de La Legión por aquél heróico y genial Coronel Millán Astray.
Si, ese mismo José Millán Astray que gritó ante Unamuno el famoso muera la inteligencia, tan repetido por tanto bobo, pijiprogre y mamarracho. Por cierto, el mismo Unamuno que, filosofando, entendía que el muero porque no muero teresiano era un buen antecedente de los "!viva la muerte!" del Tercio.
El General Millán Astray -ya General en aquella Salamanca guerrera- no quería matar la inteligencia. ¿Cómo iba a renunciar a la inteligencia uno de los militares más preparados de la época? Millán Astray estaba cansado de que un catedrático de griego quisquilloso, tozudo y tocapelotas, hiciera jueguecitos de palabras y sofisteara cuando lo mejor de España -a uno y otro lado- se dejaba la piel en las alambradas.
¿Es que puede ser un cafre, un tonto o un chulo quien es capaz de dotar a una Unidad militar de la mística legionaria?
ESPÍRITU DE DISCIPLINA: cumplirá su deber, obedecerá hasta morir.
ESPÍRITU DE SUFRIMIENTO Y DUREZA: no se quejará de fatiga, ni de dolor, ni de hambre, ni de sed, ni de sueño; hará todos los trabajos, cavará, arrastrará cañones, carros, estará destacado, hará convoyes, trabajará en lo que le manden.
ESPÍRITU DE MARCHA: jamás un legionario dirá que está cansado, hasta caer reventado; será el cuerpo más veloz y resistente.
ESPÍRITU DE UNION Y SOCORRO: a la voz de «¡a mí la Legión!» sea donde sea, acudirán todos y, con razón o sin ella, defenderán al legionario que pida auxilio.
ESPÍRITU DE COMPAÑERISMO: con el sagrado juramento de no abandonar jamás un hombre en el campo, hasta perecer todos.
ESPÍRITU DE LA MUERTE: el morir en el combate es el mayor honor. No se muere más que una vez. La muerte llega sin dolor y el morir no es tan horrible como parece. Lo más horrible es vivir siendo un cobarde. Camisa legionaria, hábito de guerrero que llevé con honor, déjamela, Señor, como sudario en el momento de mi muerte, que es vida hacia Ti.» (Del «Credo Legionario».)
Y esto no son palabras, como esas leyes y esas medidas que continuamente dice tomar el Gobierno que para nuestra desgracia desgobierna a España. Son hechos; 10.000 muertos, caídos en el servicio y defensa de la Patria, e infinidad de actos heroicos, lo demuestran y confirman. En ochenta y nueve años de vida, la Legión se ha convertido en el cuerpo más glorioso del Ejército español, que es decir del mundo entero. ¡Bien podía sentirse contento Millán Astray de su creación! ¡Bien podía sentirse orgulloso Franco —el que fuera Generalísimo de los Ejércitos y Caudillo de todos los españoles— de haber vestido una de las primeras camisas legionarias, y haber moldeado y forjado la Legión según el sueño —el ideal— de su fundador!:
«... Vosotros volvéis ahora a la rudeza de la paz y al “caffard” de los campamentos; pero pensad, caballeros legionarios, que allí se formó, se forma y se seguirá formando vuestro estilo. Estoy seguro de que si España os llama otra vez, moriréis a trozos como vuestro coronel, o completos, de una vez, como murieron los miles de legionarios en la geografía de Marruecos o España...»
(Millán Astray, citado en «La Legión, revista de los Tercios», mayo, 1978, pág. 7.)

«Vosotros, legionarios, que tantas veces, antes y ahora, habéis sido vilipendiados, sois vilipendiados, y ¿sabéis por qué?, porque os tienen miedo y ese miedo proviene de que vuestros enemigos saben que os mantenéis firmes tanto en Puerto del Rosario como en Ceuta como en esta Melilla la Avanzada. Una Avanzada que mira al Norte y al Sur. Todos sabemos que los legionarios no deseáis la guerra, sino la paz de España, pero si la paz no triunfa, que es el odio y la envidia quien pretende vencer, ¡aquí esta la Legión! Esto es lo que significa vuestra presencia y la presencia de los que de la Península hemos venido a acompañaros en este día. ¡Viva España! y ¡arriba España! Vosotros tenéis el tesoro de nuestro porvenir en vuestras manos. Así sea.»
(Fray Justo Pérez de Urbel —el que fuera abad primado del Valle de los Caídos— en su visita al Tercio Gran Capitán, 1° de la Legión, el día 25 de febrero de 1978, con motivo de la celebración del Sábado Legionario) («La Legión, revista de los tercios», abril, 1978.)
Después de las palabras de Millán Astray y fray Justo Pérez de Urbel -¡ay, qué diferencia con estos anselmillos de hoy!- bien poco queda por decir. Acaso, informar a quien lo haya menester, que aunque hayan deshecho la mitad de las unidades legionarias, el espíritu de La Legión no lo van a romper, porque es el espíritu de España.
Y todavía quedamos algunos que -sin haber vestido la gloriosa camisa verde- llevamos encima la azul mahón, que se le parece mucho en la esencia.
¡Viva La Legión!
¡Arriba España!


P.S. Para quien guste de saber la verdad, y no lo que le cuentan los tontos rabiosos, o los lameculos floridos, o los rojazos de guardarropía, pulsando sobre los títulos podrán descargarse el Diario de una Bandera, del Comandante Francisco Franco Bahamonde; o La Legión Desnuda, del Caballero Legionario Antonio Maciá Serrano; o Legionario en España, del inglés -y legionario- Peter Kemp.




sábado, 19 de septiembre de 2009

SOBRE LA CASTRACION Y LA GOBERNABILIDAD.

Comentario que me hace mi camarada Arturo, a propósito de la entrada que pueden hallar justamente debajo, y que con su generosidad habitual me permite reproducir para solaz e información de quien guste leer:

* * *

Supongo, Rafael, que te enteraste de los estudios sobre los ríos europeos (en España sólo lo hicieron sobre el Ebro). Resultó que contenian y daban a beber buenas concentraciones de antidepresivos, calmantes y hormonas femeninas. Las hormonas, a causa de que la píldora es la cosa más usada.
Las substancias esas no son eliminadas en las depuradoras ni por el río y vuelven a llegar a los grifos y no pocas veces se filtran hasta las aguas subterráneas.
O sea, que lo que Zapatero está haciendo, además de darnos pol culo, es caparnos químicamente. Así somos más manejables. Y con las otras substancias evita que la tristeza nos saque de quicio.
No es una broma el hecho de que las mujeres conciban menos y que los hombres tengamos espermatozoides de menor calidad: afeminados los tíos. Con algo de tiempo les empezará a pasar también a los moros y al freir será el reir.
Me pregunto qué harían ahora los mustafás si supieran lo que les está pasando a las gónadas morunas. Y los españoles de poco pelaje, de los que votan Psoe, porque es el partido de los pobres y de los maricones y, además, de los castrados.
Y esto, que salió en diferentes informaciones oficiales de la Unión E, lo tienen que saber nuestros gobernantes, que nada dicen y seguro que nada hacen. El pueblo drogado y el hombre semicapado son elementales para la democracia ladrona e inerte.
No sería mala idea insistir en la cosa de los huevos mortecinos que Zapatero ha de saber. O sea, está por la fabricación de hombres con menos empuje. Si hasta los catalanes no son los mismos. Casi ni tiran objetos contundentes en su 11 de Septiembre. ;) Democracia química. No parece mal a los tiranos.
Y palabra que es cierto lo de la química fluvial. Imagina, desde Madrid p' abajo, cómo llegará a estar el Tajo.
Arturo.

SOBRE LA CASTRACIÓN.

La -química, evidentemente- que la consejera de Justicia de la Generalidad de Cataluña propone como solución a los delitos de violadores reincidentes, paidófilos y otro ganado similar.
Lo siento por doña Sonsoles, pero díganme si don José Luis Rodríguez, que tanto tiempo lleva dándonos por culo, no es un firme candidato al tratamiento.

SOBRE LAS PRIMERISIMAS NECESIDADES DE LA SEÑORA SALGADO.

Ministra, como alguno de ustedes quizá sepa, de Economía y Hacienda o algo así, y ayer portavoz del Gobierno por gracia de los intestinos de doña María Teresa.
En tales funciones -¿o funcionas?- de portavoz -o portavoza-, aseguró que el Gobierno no va a subir el IVA superreducido, que es el aplicado a los productos de primerísima necesidad, tales que el pan, las frutas, las hortalizas, y la leche. Eso, la leche.
¡Loado sea Dios!, exclamarán los bobos, los gilipollas y los socialistas, alegrándose de que los impuestos que suban sean, por ejemplo, los de los combustibles. Eso, que se jodan los ricos, que son los que van en coche.
Obvian el pequeño detalle de que el pan, las frutas y la leche hay que transportarlas, y si se encarece el combustible se encarece el transporte. El de las lechugas y el del parado que se desplaza en autobús.
Pero de esto no se darán cuenta los bobos, los gilipollas y los socialistas -los tres o cuatro que no tengan coche oficial-, porque son de los que piensan que el pan ya sale hecho en una maceta de la panadería; que las frutas y hortalizas nacen por generación espontánea en las fruterías, y que es en las estanterías del supermercado donde se produce la leche.
Eso, la leche.

jueves, 17 de septiembre de 2009

SOBRE LOS LUJOS INNECESARIOS.

Que estamos en crisis -económica, digo ahora- lo sabemos todos; incluso desde antes de que el señor Rodríguez confesara que había crisis, tras negarlo repetidamente hasta que le metieron las papeletas por la urna, siguiendo el camino recto que -para los socialistas- es la mentira.
Entre paréntesis: para los peperos también, y no digamos para los soviéticos de guardarropía que quedan por alguna esquina, y para los giliprogres de camiseta del genocida Che Guevara; y para los antifascistas -que también son antisistema, y antijabón, y antineurona, y antitrabajo-; pero ahora hablo del que negó la crisis, y ese fue el rojo Zapatero. Fin del paréntesis.
Bien; pues como estamos en crisis -por culpa de Bush, evidentemente- tenemos que prescindir de los caprichos. Y hé aquí que, según cuenta 20 Minutos citando un informe del Instituto Nacional de Estadística, los divorcios han bajado en un 13,5% en el año pasado.
¡A ver si ahora va a resultar que lo de divorciarse es un capricho más de la sociedad de consumo!

lunes, 14 de septiembre de 2009

SOBRE LA IMPIEDAD.

La del señor Anselmo Álvarez, que se dice abad de la basílica del Valle de los Caídos, y que -informan El Nuevo Alcázar y El País, al que cito para que no digan, entre otros periódicos- ha escrito una carta al ABC -cuyo enlace omito, puesto que no los mantienen disponibles mas que un poco tiempo- en la que dice que el funeral en memoria de José Antonio Primo de Rivera y Francisco Franco no se volverá a celebrar.
El señor Álvarez ha decidido que, en aplicación de la ley de memoria histórica, la memoria litúrgica de los aniversarios de Franco y José Antonio, se efectuará durante la misa conventual del día 20 de noviembre; y que el día 3 de noviembre los monjes celebrarán un funeral por todos los caídos.
Esto de rezar por todos los caídos -por mucho que el señor Álvarez no lo sepa- ha sido la norma desde el principio del Valle de los Caídos, y testigo soy de ello desde 1979 al menos. Si el señor Álvarez no está de acuerdo conmigo, que me llame mentiroso y allá veremos.
Es más: si no mal recuerdo, este mismo señor Álvarez -salvo que haya relevado recientemente al abad que hubiese en 2005- dijo esto mismo en la Misa del citado año, sin que ninguno de cuantos asistíamos protestásemos por ello, y también soy testigo.
En cuanto a no celebrar funerales por los difuntos, el señor Álvarez parece inclinarse a la norma de muchos clérigos que niegan sacramentos según sus personales simpatías. Ignoro si entre sus competencias o incompetencias figura la de seleccionar a los solicitantes de misas funerales, acaso en virtud del pedigrí democrático que presenten, o del antifascismo rampante que exhiban.
Pero, señor Álvarez, flaco favor hace a su Ministerio negando funerales a los muertos; a su monasterio, negando como Pedro a quien lo fundó; a la Iglesia, negando el pan del recuerdo y la sal de la oración a los católicos que lucharon por Dios.
Flaco favor se hace a sí mismo, señor Álvarez, cediendo al miedo, al complejo, al qué dirán y a la cuenta corriente.
Dios no se lo tenga en cuenta, porque yo si se lo tendré.

sábado, 12 de septiembre de 2009

SOBRE LOS NO AJUSTES.

Porque -cuenta El Imparcial- según don Pepiño Blanco, lo que su Gobierno prepara con la subida de impuestos desde luego no va a repercutir en aquellas personas que son trabajadores, que son pensionistas, que no tienen grandes fortunas; a ellos no va a llegar el ajuste en nuestra política fiscal.
Claro, Pepiño, claro. La subida del impuesto especial de hidrocarburos -la gasolina y el gasoil, aclárase para socialistas- no afecta a los trabajadores.
La subida de los impuestos especiales del tabaco y los licores no afectan a los trabajadores.
La subida de todos -todos- los artículos que son transportados en camión, en furgoneta o en moto, si me apuran, no le afecta a los trabajadores.
Y, por ultimo, la subida del IVA no le afecta a los trabajadores.
Sólo a los ricos que fuman; beben -licores o agua envasada-; tienen coche, moto o ciclomotor; compran pan, patatas, chorizos o leches; consumen llamadas telefónicas -a la querida o a urgencias, que es llamada de lujo-; cogen al autobús, el metro -donde lo hay-, o el cercanías para solazarse, porque la gente no usa el transporte público por necesidad, sino por vicio.
Es lo que tiene el Estado socialista de don Pepiño y adláteres: que las subidas de impuestos no le afectan a los trabajadores, sino a los ricos y a los vagos. Así es que veo a don Pepiño hipotecando su ático de Villa Psoe para pagar impuestos solidarios.

SOBRE LA CARTA DE BLAS DE LEZO

Camarada muy querido y aún más respetado, que a propósito de mi comentario sobre el fulanillo Espot me dice:
A eso que se llama Catalunya Accio le he enviado esta carta.

He leido lo que dice el señor Espot sobre España y los españoles. Yo comprendo que él no quiera ser español, porque en eso coincidimos, yo tampoco quiero que él lo sea. Comprendo que le gusten los patios con olor a butifarra pasada de fecha y la mentira como base de su saber histórico, yo lo comprendo todo, pero no entendía por qué quiere ser catalan independiente echando babas por la boca, insultando a los que, pese a los tiempos en que vivimos, queremos que España sea España y no una mierda como pretende el señor Espot y sus conmilitones. Y no entendía esta postura hasta que se nos hizo la luz. El señor Espot dice eso simplemente porque es un perfecto gilipollas.
Solucionadas las dudas.
Blas de Lezo

Imposible decirlo mejor.

SOBRE LAS ENFERMAS Y LOS ODIOS.

Porque una dama -vaya, disculpen, es un decir- que se firma Nataliya y se expresa en su blog -si bien brevemente, pues sólo ha escrito una entrada, la pobre, vaya esfuerzo intelectual- dice que estáis enfermos de odio, tíos, en comentario a mi entrada de hace casi un mes titulada SOBRE LA IMAGINACION, en la que ofrecía ideas imaginativas a don José Luis Rodríguez.
Se refiere a mis habituales y camaradas Antón, 27 puntos y soldadito valiente y -obvio- a mí mismo.
Lo que no entiendo es por qué habla de odio ajeno una señora -o señorita, o señorito, o señoroto- que lo único que ha publicado es una receta para que una princesa innominada adelgace, a base de insecticida, lejía, productos de limpieza varios, pis -¡ay, Nataliya, qué delicada!- y vodka del padre y prozac de la madre, lo que acaso para conocedores indique a qué princesa encomienda su ingenio.
¿Te parece odio, Nataliya, decir que para una economía verde hay que desmantelar las industrias? Pues díselo al señor Rodríguez, que está empeñado en cerrar centrales nucleares aunque los técnicos digan que cumplen los requisitos para seguir funcionando, y aunque en nuestro entorno europeo se esté volviendo a la energía nuclear precisamente por menos contaminante que la de orígen térmico.
¿Te parece odio, Nataliya, propugnar que se establezcan acuerdos que promuevan la industria nacional -perdón, estatal, autonómica, provincial, pueblerina, aldeana- del turismo, con iniciativas copulativas?. Pues díselo a don José Luis, que fue el que declaró que había firmado con Rusia acuerdos para follar.
¿Te parece mal que me cachondée con los impuestos especiales sobre los coitos y los cuernos? ¿O lo que te parece mal es que indique que deben pagar más los que forniquen menos, por su actitud insolidaria con los acuerdos firmados por don José Luís Rodríguez que cito en el anterior párrafo?
¿Te parece mal el pitorreo acerca de los pantanos y embalses que no se han construído desde hace más de treinta años, porque el último se inauguró en 1976, cuando la población española era de unos diez millones de personas menos? ¿Te molestan las obras públicas? Pues díselo a don José Luis, que ha elaborado el llamado plan E para arreglar cuatro cosejas aquí y allá, con gran alarde publicitario -¿quién será el afortunado empresario que fabrica los cartelones?- y obras tan imprescindibles como pistas de scalextric.
¿Te parece mal que sugiera traer agua en aviones desde Brasil? Vale, un poco exagerado; quizá sería mejor desde Venezuela, ya que somos tan amigos de don Hugo; pero de todas formas, díselo a Montilla, que la trajo en barco desde Francia el año pasado o el anterior, toma pasta gansa inútilmente gastada con tal de que los valencianos se mueran de sed y el Ebro siga perdiéndose en el mar, que es el morir.
¿Te parece mal que indique la conveniencia de fabricar -en China, para no contaminarnos aquí- cochecitos a pedales? ¿Te parece mal que seamos ecológicos? Pues díselo a don José Luis Rodríguez, que va a subvencionar generosamente coches eléctricos, que sólo podrán usar los que tengan garage en su propia casa -o sea, pobres no, gracias-, porque a ver quien coño se puede estar dos o tres horas anclado a un poste para recargar las baterías. Y a ver de donde sacamos la electricidad, si ya hemos quedado en cerrar las nucleares. Pues de Francia y Marruecos, que es lo que digo.
¿Te parece muestra de odio sugerir que se subvencione a gays, lesbianas, transexuales, neutros y otra fauna? Pues díselo a don José Luis Rodríguez, que bien se despacha en ello aunque piense suprimir el cheque-bebé.
¿O lo que te parece mal es que me postule como posible Ministro? Ya comprendo que acaso tu, Nataliya, tengas el mismo deseo, pero el mío es igualmente legítimo que el -presunto- tuyo, y que el de don José Luis Rodríguez, porque la Constitución nos abre a todos el derecho a ser elegibles salvo sentencia judicial en contra.
Y, con todo el odio que me adjudicas -a mí y a los amigos y camaradas que cito, y que no tienen más culpa que la de haber sido nombrados por mí- sigo en plena posesión de mis derechos civiles, porque ni he delinquido, ni padezco enfermedad mental que me prive de ellos.
Ay, Natalita, a ver si eres tu la que padece alguna enfermedad que le impide distinguir la ironía de la realidad, y en tal caso habría que tomar la entrada única de tu blog por una amenaza, en lugar de una broma.
¡Que pena, que con ese pseudónimo tan bonito -por cierto, yo firmo con mi nombre y apellidos- seas tan tonta!

viernes, 11 de septiembre de 2009

SOBRE LOS ABUCHEOS.

Hasta El País lo dice: La crisis se impone a los abucheos soberanistas en la ofrenda.
Vamos, que los ex-trabajadores no tienen bastante con el Estatuto, las declaraciones separatistas, los gilipollas como el de la entrada contigua, los mosos de escuadra, el charnego Montilla o el capullo Carod.
Y es que hay gente que se queja de vicio. ¿Es que no están contentos con las embajaditas de los primos, sobrinos, cuñados, hermanos o gametos perdidos de Carod Rovira? ¿No se emocionan con las subvenciones al estudio del catalán en lejanos países? ¿No se reconfortan el estómago -a falta de pan- con las suculentas butifarras que se meten -cada cual según su gusto- a la mayor gloria de la zafiedad aldeana, cuando intentan ofender a España ante la mansa mirada de las autoridades incompetentes, civiles y militares? ¿No se sienten extasiados de puro gozo al ver los triunfos de su mescunclú laportino?
Al lado de todo eso, ¿qué es pagar una hipoteca fascista, qué es el capitalista hábito de comer a diario? Lo dicho, se quejan de vicio, o son fachas infiltrados en la emocionante celebración de la derrota militar del pretendiente Carlos de Austria hace dos siglos largos.

SOBRE EL CUBO DE LA PORQUERÍA.

Hay en la región de Cataluña un hijos de puta llamado Santiago Espot. Bueno, por haber hay muchos: tantos como renuncian a su madre España; pero así llamados y que haya salido en los papeles, sólo este por el momento.
El hijo de madre desconocida Santiago Espot es presidente de Catalunya Acción, chiringuito del que debe comer porque no se le asigna otra ocupación conocida. Y este hijo de puta, cabrón sin pintas siquiera, gilipollas cum laude, mamarracho oceánico, dice que el Estado español es “un cubo de basura donde se aboca toda la porqueria”.
Tiene razón el idiota en esto. En España llevamos muchos años recogiendo basura.
La solemos poner de presidentes de grupitos gilipollas.

SOBRE DIRECTORES.

Directores hay muchos y de muchas clases, evidentemente.
Hay directores generales de empresa y de la administración; hay directores de cine y de teatro; hay -o había- directores de pista en el circo, y payasos -primera acepción- que se creen que dirigen algo.
Y hay directores de periódico.
Mi primer director fue el General don Manuel Ballesteros, que lo era de Fuerza Nueva -revista- allá por el lejano 1979. Me acogió con una benevolencia y cariño a los que intenté corresponder sacando lo mejor de mí. Ignoro si llegué a cubrir sus expectativas, pero el caso es que debió ver en mi quehacer una aceptable madera, ya que no maneras, porque me publicó en páginas centrales un par de larguísimos artículos, amén de otra veintena de más considerada extensión. En cierta forma, don Manuel Ballesteros es el culpable de que siga aquí, aporreando teclas.
Casi sin tocar baranda pasé a ser -con la inevitable petulancia de la juventud- mi propio director en varias publicaciones pequeñitas, de Distrito, en las que apliqué las enseñanzas que había recibido. Con cierto éxito, y no lo señalo por vanidad, sino en justo reconocimiento de lo mucho y bien que trabajaron aquellos Distritos madrileños, que consiguieron un casi imposible: que ni un sólo ejemplar fuese a la basura, y que incluso nos llegaran -de muy arriba- solicitudes de números atrasados que hubo que fotocopiar porque no quedaba ninguno sin vender.
Tuve después otro director, y esto son ya palabras mayores: Antonio Izquierdo en El Alcázar, que tuvo la gentileza de publicarnos a mi camarada Eloy y a mi algunos articulillos en aquél Escaño Nacional, a mitad de camino entre las Cartas al Director y los artículos de opinión.
Vino luego la aventura de EJE en Juntas Españolas, y en ella estaba cuando apareció La Nación, que comenzó siendo semanario dirigido por Félix Martialay.
A Félix Martialay lo conocí en el sótano de Florestán Aguilar donde La Nación tuvo su primer local. Era difícil que coincidiéramos, porque él trabajaba en horario de tarde y al periódico sólo podía ir por las mañanas, y a mí me ocurría exactamente lo contrario. A cuenta de ello, nuestra relación fué más bien telefónica, y en un par de ocasiones me obsequió con una portada, supongo que más por el tema que tocaba que por el merecimiento del firmante.
Ahora -ayer, con el retraso del que no puede dedicar al conocimiento del mundo todo el tiempo que debiera- conozco por El Nuevo Alcázar la triste noticia de su fallecimiento el pasado 9 de septiembre.
Fue Félix Martialay un buen periodista, un esforzado director de El Alcázar en una época en que ya la prevaricación gubernamental socialista lo sitiaba por hambre; esto es, por la negación de la publicidad institucional obligada por ley. Fue un gran director y editor de La Nación y fue, sobre todo, un hombre fiel.
Descansa en paz, Félix. Y échanos una manita desde ahí arriba.

viernes, 4 de septiembre de 2009

SOBRE LA CONSOLIDACION FUNERARIA.

Así me presenta mi camarada Arturo su nuevo artículo: Hay que impedir que nuestro patrimonio presidencial se pierda. Urge una ley de sucesión de enterraderos.
Una vez más, Arturo deleita enseñando, o enseña deleitando, cosa tan difícil que ya han renunciado a ella los presuntos zurcidores de cultura democrática y porcina. De modo que copio su ingenio:

A CONSOLIDARSE

El mundo antiguo, decadente, tenía, como todas las decadencias, un buen turismo. Había un buen mapa de carreteras, escrito, salpicado por albergues y oficinas de alquiler de caballos y de carruajes. El romano del Imperio no siempre iba vestido de centurión ni acuchillaba bárbaros sin descanso. Viajaba incluso en literas y consumía folletos primorosos. ¿Quiere andar sobre las aguas? Le esperamos en el Mar Muerto.
Se hace impensable que el romano, decidido a ir a la cuna del Imperio, se parara en Ostia y no llegara hasta la misma Roma: a ver el Capitolio y el Senado o el Obelisco de no sé quien, pero que está allí y tiran los platillos volantes en todas las películas. Pero como ahora lo divertido del viaje es comprar y pagar sobretasas, nos vamos a Nueva York y creemos que conocemos los Estados Unidos.
Lo razonable es ir a Washington, ciudad que fue diseñada, de una tacada, según planos masónicos, además de neoclásicos. Desde Washington es cosa de nada llegarse a Arlington y ver aquellos jardines de la muerte, bellos como los Campos Elíseos. Y comprobar que ya no se ponen cruces en las tumbas, quizá para no ofender al moro que tenga el capricho de ir a la sepultura del americano que se cepilló.
Pero lo magnífico es el lugar. Y, más, la previsión: el patriota condecorado tiene donde pasar la eternidad, bajo césped bien cuidado. Todo está previsto y eso indica más de dos siglos de planificación y de vida bien ordenada convertida ya en costumbre.
Al regresar es fácil comprender que en España tenemos una democracia poco consolidada. O sea, tenemos pocos negros. No disponemos de Capitolio, ni de obelisco grandioso, ni de Casa Blanca con cúpula, ni de la opresiva estatua de Lincoln, que, vayas donde vayas, te mira. Ni siquiera un maldito Pentágono.
Bien es cierto que nuestro Palacio de Oriente tiene estampa y que se le puede acoplar una cúpula por mucho menos de lo que devora una autonomía. Y, para tenerlo cerca, en la Plaza de España, bien se le puede dar un revoque a la Torre de Madrid, terminarla en punta y que haga las veces de Obelisco. Lo de Arlington se podria imitar ajardinando bien Paracuellos o, quizá, verdeando los campos del Valle de los Caídos, pero eso es un suponer amplio como espejismo.
No todo está mal. Sabemos, desde el nacimiento, donde enterrarán a Su Majestad el Rey. Y, como tenemos tradiciones, ni siquiera lo enterrarán sino que lo pondrán en el Pudridero, amparado por la elegancia lineal de El Escorial y por la compañía de sus mayores.
Pero con una democracia constitucional apenas desde hace 31 años, hay cosas poco estudiadas que desmerecen de nuestro empaque mundial. Al regreso de Estados Unidos se nota más el vacío. Porque, vamos a ver, ¿dónde enterrarán a Suárez que no se olviden sus servicios? ¿Bajo una cruz o a la sombra de un frontón equilátero con grandes altorrelieves como, por ejemplo, Suárez conduciendo de Segovia a Prado del Rey? O Suárez derribando el Estado sin que se le desconecten ni tuberías ni cables eléctricos mientras la techumbre, pese a todo, sigue amparándonos de la lluvia y de otros meteoros, como las lágrimas de cocodrilo.
¿Y dónde enterrarán a González cuando le suene la hora, como la hacía sonar Quevedo, que es que arrebataba la hora esa. ¿Al pie de la Giralda, que es cosa muy andalusí y muy llevadera con las ya presentes invasiones de neo-almohades y neo-almorávides? Con lápida más que cruz: “Morito, ve a España y cuenta que aquí abrimos la puerta suplicando tu perdón a cambio de gas natural.”
Pero sigue siendo una improvisación. No podemos sembrar, ni al boleo ni al tresbolillo, los cadáveres de nuestros presidentes. Hay que reunirlos en un lugar para que se puedan visitar sus tumbas y rezarles un poco, en todas las lenguas autónomas, en una jornada. Un sitio con restaurantes, una piscina, hoteles, cines… ¿Todo eso que dicen las lápidas es posible? Y el guía respondiendo: Como lo oye. Después de Aníbal, los más.
Hay que hacer leyes que prevean estos asuntos, eligiéndoles algún lugar histórico ya consagrado por la muerte, como Numancia, y dotarlo de autopista, AVE y Guardia de Honor que no deje, por ejemplo, entrar banderas anticuadas porque, a ver quién sabe hoy qué bandera usaban los heroicos numantinos cuando su disputa con el republicano Escipión.
No conviene, por la imagen pública, permitir que nuestros presidentes se nos esturreen en muerte. Suárez, quizá, en Ávila; González, pasado Despeñaperros. Aznar… coño, Aznar. No es tan fácil porque al ser del Rompeolas de las Españas, habría que buscar un buen estanque y el Retiro señala demasiado hacia el final de su carrera administrativa. Pero lo de Aznar es urgente porque si muere durante un gobierno socialista seguro que se las apañan para enterrarle en Las Azores. Inolvidables islas.
Lo mismo que si, cuando el óbito de Zapatero, gobierna el PP, nadie le va a librar de una dedicatoria tipo “Al Presidente Rodríguez,” que nadie será capaz de indentificar con el Presidente Zapatero gracias, precisamente, a las leyes de educación y sálvese quién pueda que se imaginó.
Y es previsible, además, para herir la sensibilidad socialista, que le incluyan una corona de piedra, bien grande, con el cintajo de mármol proclamando “Los banqueros, agradecidos.” Y, en más pequeño “y los moros también, pero no tanto.”
Hasta que no sepamos los españoles donde van a reposar nuestros Primates no se habrá consolidado esta democracia que nos metieron a nosotros mismos. No sólo por poner orden legal en la muerte sino por protegerles eternamente de las iras que yendo y viniendo, acabarán profanando las tumbas egregias. Es la tradición.

Arturo ROBSY

Nota: Véase “primate” en el diccionario. No sólo es “simio o lemur” como se creen muchos primates. Justo la primera acepción.

* * * * * * * *

Por comentar, Arturo, te señalaría que nuestro Pentágono podría estar en La Granja, no sólo por la asonada decimonónica o la referencia orwelliana, sino por la constatación de que los huevos son producto doméstico y domesticado, de consumo pautado y calibre preseleccionado y etiquetado.
Y también que aquí, en Madrid, ya vamos a tener un Obelisco en las debidas condiciones: justo en la Plaza de Castilla, frente al chiringuito judicial, donde estuvo la estatua de Calvo Sotelo, que a saber qué les habrá hecho para merecer el desalojo, salvo aquello de dejarse sentenciar por los comunistas y matar por los socialistas.
No me parece, en cambio, tan seguro lo del futuro enterramiento de Su Majestad. Y no lo digo porque confíe en que no acabe sus días en el cargo -según tan democrática y republicanamente le expuso en audiencia el sucesor de Carrillo-, ni porque espere -un suponer- que en una de sus travesías pierda pié y Bribón y desaparezca reclamado por las sirenas; sino porque he leído en algún sitio de esos tan dinásticos, que ya no queda sitio en El Escorial para más reales fenecidos.
Por lo demás, propondría como lugar de egregios enterramientos presidenciales la Casa de Campo madrileña. Ya se que es volver al centralismo opresor y tal, pero considero que determinadas zonas de la antigua finca real se verían muy realzadas y bien que lo necesitan.
Cuentan los periódicos que actualmente se dividen el egregio lugar entre prostitutas subsaharianas, latinoamericanas -mejor no decir hispanas para este menester-, eslavas... Y de otra parte, los efebos de diverso origen y condición, que igualmente hacen sus pinitos, trabajos y faenas. En fin, una multiculturalidad y una multisexualidad bien organizada.
¿No sería justo facilitarles la dura jornada, colocándoles una hermosa escalinata que diera acceso a la descriptiva escultura del chuletón de Avila? ¿Un florido paseo, estucado de bonsais, para Isidoro? ¿Una vasta -y basta- lápida de agradecimiento firmada por el movimiento nacional de liberación vasco, o como coño quiera que calificase Aznar a los etarras cuando se dió el pico con ellos? ¿Un gigantesco anuncio hollywoodiano con la cita NO HAY CRISIS, coronando un monumento al abuelo desconocido, para Rodríguez?
Todos ellos darían oportuno cobijo y mejores condiciones copulativas a los pernoctantes laborales de la citada Casa de Campo, regalo real al pueblo de Madrid, ahora traspasado a la alianza de fornicaciones.
Así, convertidas en herramientas de trabajo, puede que escapasen de la profanación los enterramientos de los augustos próceres.

jueves, 3 de septiembre de 2009

SOBRE EL CHACONDEO DE LOS DELINCUENTES COMUNES

Lo dice El País:

Chacón atribuye a "delincuentes comunes" el ataque contra un sargento en Afganistán

Las tropas españolas matan a 13 talibanes en un combate de seis horas


Pues -me permito comentar- si mandamos tropas a combatir a los delincuentes comunes, no se a qué coño espera doña Carmen para traerlas de vuelta a toda leche, porque aquí no les iba a faltar trabajo.

SOBRE EL RESPALDO.

Que don José Luis Rodríguez ha ofrecido a don Barack Obama, en el proyecto de este último de relanzar el proceso de paz en Oriente Medio.
Ignoro qué costumbres atesora el señor Obama a la hora del merecido descanso, pero ello no obsta para poder afirmar que ayer, tras conocer la decisión del señor Rodríguez, durmió a pierna suelta, ajeno a toda cuita sobre su política exterior.
Es lo que tienen los ataques de risa: que luego se duerme como un bendito.

SOBRE UNA HERMOSA VERDAD, O UN ZAPATERO SEDENTE.

Porque ZAPATERO GENERALMENTE SEDADO titula mi camarada Arturo otro de sus magníficos artículos, en el que, además de descubrirnos la sedación política cotidiana y polivalente, enseña a quien lo haya menester -como este que suscribe, sin ir más lejos-, cosas sustanciosas y un algo afiladas.
Palabras como órdenes que hacen la luz, y razonamientos bruñidos como bayonetas, que no llegan a destazar mondongos, pero picotean popas desaposentadas.
En resumen, Arturo: que una vez más me apropio de tu verbo para honrar este diario mío.

ZAPATERO GENERALMENTE SEDADO

Con lo que está cayendo desde los cielos nacionales e internacionales y de los bancos, que piden como las palomas de la plaza de Cataluña, no se puede tomar a mal que el Presidente R. Zapatero, empeñado en seguir erre qué erre, esté habitualmente sedado, tal como descubrimos al repasar las fotografías de su vida publica.
¿Es malo un presidente sedado? No especialmente y hay que reconocer que sería mucho peor un presidente dando brincos, saltando a la comba o cazando moscas. ¿Para paparlas? No: ya se sabe que cazar moscas es un mal síntoma, porque a veces las moscas cazaderas no están presentes y el afectado anda dando manotazos a las musarañas de los sus ojos, tras horas de pensar en ellas. Y las musarañas, como las moscas, son fastidiosamente movedizas.
O sea, si es usted español, relájese. Lo de Zapatero es normal. A cualquier hora del día que elija, verá que la mitad de la población está sedada. Los médicos en sus covachuelas; los maestros en las suyas. Los conductores. Hay muy buenas estadísticas que demuestran que todos –todos- los conductores van sedados en los coches.
¿Lo que cae del cielo justifica que el presidente pase mucho tiempo sedado? Lo que cae suele hacerlo de punta. Verbigracia la forma de caer de los chuzos. Aunque no es caso de recordar ahora esas sabidurías del Pueblo, actualmente socialista, sobre lo que les cae a los que escupen al cielo, ni donde les cae. Porque todo es caedizo en este mundo, como los rayos que caen y, además, parten; o los Imperios y los gobiernos, que también caen en cuanto el personal se descuida. Cae la bolsa, ya se sabe, y uno hasta se cae de las listas o, con humildad, cae en la cuenta.
Así las cosas, si un Presidente piensa en las caídas que rondan, lo mejor es sedarse y pensar, más o menos neblinosamente, “ahí me las den todas.” Pero ahí no se las dan, porque la información a la que está accediendo usted es tajante en otros aspectos. ¿Recuerdan como una cadena de tele demostró que más de la mitad de los parlamentarios italianos, le daban al canuto? Fue un sonoro escándalo, pero nada comparable a lo que se desvela aquí: Nada de drogas pero hay constancia de que el cien por cien de los diputados y senadores y los diputados autonómicos, o sea, la totalidad de los políticos españoles de cierto rango, o de cierto enchufe, cumplen sedados con su misión pública.
Demasiadas cosas en lontananza para el cerebro diputado. Y más aún en cercanía. La contemplación de la lontananza y de la cercanía, más lo que viene por sotavento obliga a sedarse.
-Pero, oiga joven, ¿sedados sedados?
-Con todo el cuerpo, ya ve, aunque siempre afecta más a las nalgas. Una extraña ley de la naturaleza. Se conoce que las ancas pueden ser la condición sine qua non para los prólogos del pensamiento floreciente; su soporte acolchado de la razón.
La historiadora Doris, tras observar el envés de muchos, calcula que los hechos más terribles de algunos se han debido a nalgas poco mullidas que no facilitaban el libre tránsito de las ideas humanas. Véanse las de Lenin, o las de Largo Caballero, por no mencionar las de la señora Fernández de la V.
Tampoco hemos terminado: la mayoría de los miembros de cualquier tipo de sesión, tanto parlamentaria como de cine o tele, también están atacados por el vicio de mantenerse sedados. Y los que asedian al PP, sedados en extrañas circunstancias, sin olvidar a los cientos de Asesores del Sr. Zapatero, y los demás burócratas que rondan por la sede del gobierno, o, por las demás sedes de los demás gobiernos, especialmente los más insidiosos
-¿Se da usted cuenta de que está acusando a millones de personas, señor?
-Estoy acusando casi a la totalidad del género humano, que está sedado desde hace mucho, empujado por la evolución de su inteligencia. Sedado, querida Historiadora Doris, se está mejor.
-¿La epidemia se debe a que los médicos de la SS van a lo suyo y sueltan sedantes como confites?
-¿Y qué pintan en esto los médicos, si hace apenas cien años recetaban hierba Luisa o, fíjese el trabajo de lengua y labios, “ipecacuana.”? Se trata de un hecho histórico, mi querida Historiadora: Ipecacuana, y hay otra cosa médica con más gracia todavía: Externocleidohioideo. Sédese y le saldrá perfecto.
-¿Seguro que estamos hablando de sedar, de sedación?
-Claro que su atribución a los médicos puede explicarse: ellos también andan sedados, como creo que especifiqué antes. Aunque, de hecho, hay contradicción entre andar y sedar.
-Por dar un detalle histórico, señor: ¿se da cuenta de que cientos de fiscales caerán sobre usted si sostiene esas ideas sobre el Presidente y los demás? ¡Sedados!
-¿Y por qué? Es una posición del cuerpo y del alma. Muy provechosa para los pies. Claro que también podemos decir “chairman” en lugar de presidente. El hombre de la silla.. Para ser exactos en español, “el hombre de la silla de mandar.”
-¿Es que todos, como dicen los neurólogos, segregamos unos opiáceos naturales, o, quizá, unos cannabiáceos? Y que a usted le ha dado un subidón de ellos.
-¿Pero usted me ve, bella Doris, con cara de neurobiólogo? Hurgo en las neuronas, sí, pero desde fuera y con cierto sentido histórico. ¿Cree que cuando digo “sedado” digo saturado de caros calmantes?
-¿Y qué otra cosa, si no?
Pues sólo hablo de historia, con un toquecito de palabrería. Ni siquiera se si “cigote” se escribe zigoto. Me refiero a la gente de la Tierra Seca, y, naturalmente, doy vueltas sobre la raíz “sed”. Sedar, buena mujer, quiere decir sentar. Y, a fuerza de sentarse, la gente se tranquiliza, pero en épocas más tardías. Si digo que el Presidente está sedado, eso mismo dice la palabra: sentado delante. Si digo que en las sesiones política la élite está sedada en su mayoría es porque “sesión” es la acción de sentarse. En antiguo, quizá, pero sentados. Y si digo que todos estos tíos –se me escapaba- son insidiosos es que están sentados sobre algo, bueno o malo. Como si digo que el PP está asediado, es que se le han sentado alrededor. Y que él mismo está sedente.
-Pues dígalo aquí, que esa gente sólo lee las letras gordas.
Bueno, pues sedar, del protoindoeuropeo “sed-“ significa sentarse y, también, calmar, que es lo normal cuando uno se sienta. ¿O sea, cree usted que tampoco están calmados? ¿Qué se les hacen los dedos huéspedes, o asientos? ¿Qué puedo hacer yo si los médicos, por darse pote, meten mano a las palabras viejas?
-Callarse y disimular.
-Por cierto, bella historiadora, ¿le he dicho que callar desciende, en origen del mismo sitio que liberar, dejar ir, bajar, soltar y, lo más interesante, heredar?

Arturo ROBSY


martes, 1 de septiembre de 2009

SOBRE LAS RENTAS DEL CAPITAL.

Que dice el señor Presidente del Gobierno que son las que van a tributar más para que él pueda seguir regalando 420 euros a los parados recientes; esto es, comprando votos. Los parados más antiguos, que son -por lógica- los que peor situación soportan, que se jodan.
Dicho de esta forma, la mayoría de los votantes socialistas estarán muy contentos: eso, eso, que le zumben bien a los capitalistas, dirán como remedo del mételes caña, Arfonso de cuando González miraba a otro lado mientras Arfonso, quillo, prevaricaba, corrupcionaba y nepoteaba a cuatro patas.
Veremos qué piensan los votantes socialistas, tan de izquierdas, tan anticapitalistas -y tan gilipollas- cuando el señoz Z le meta mano a los mínimos intereses que perciben de alguna cuenta corriente, o de alguna pequeña participación en fondos de inversión, o de alguna participación de la misma deuda pública que tanto publicita el propio Gobierno.
Porque los que tienen algo de dinero, procedente del ahorro -esto es, ya previamente sometido a la declaración de la renta anual- son los que van a pagar los inventos zapaterianos, o pepiñeros, o salgadinos. Esos, y no los capitalistas de puro y chaqué, que siguen formando parte de la iconografía de un socialismo decimonónico y espeso.
Un socialismo afincado en la sopa boba, que prefiere regalar inútilmente unos 420 euros que a nada llegan, en vez de invertir esos miles de millones -y los de las prórrogas de subsidios de desempleo-, en abaratar los costes de contratación. No de despido, ojo, sino de contratación. Por ejemplo, subvencionando las cuotas de Seguridad Social de las empresas, por cada trabajador que contraten de modo indefinido. ¿No es mejor eso, que tirar el dinero en prolongar la miseria?
Pero es que yo no soy socialista, sino Nacionalsindicalista, y no tengo que andar chorizando votos y poniendo jeta de progre.

Publicidad: