La ocurrida en el caserío de los padres de Zigor y Arkaitz Goikoetxea que -según dice El Imparcial- ha sido incendiado por unos desconocidos, aunque una vecina consiguió sofocar las llamas.
Ni que decir tiene que esto es algo que siento profundísimamente.
(El que la vecina de marras extinguiera el fuego, quiero decir)
Ni que decir tiene que esto es algo que siento profundísimamente.
(El que la vecina de marras extinguiera el fuego, quiero decir)