Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

lunes, 27 de enero de 2020

SOBRE RECUERDOS Y OLVIDOS.

Recordaba ayer el Papa Francisco, tras el rezo del Ángelus, que hoy se conmemoraría el aniversario de la liberación de Auschwitz, y que era inadmisible la indiferencia ante este tipo de cosas.

Como temo que Francisco -para cada vez más españoles el cura Paco, en obsequio de aquél pobre mamarracho de la llamada Transición- olvide otros casos similares y aún peores, he creído oportuno hacer mi propio ejercicio de memoria en El Correo de Madrid.

Publicidad: