Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

sábado, 19 de septiembre de 2009

SOBRE LA CASTRACION Y LA GOBERNABILIDAD.

Comentario que me hace mi camarada Arturo, a propósito de la entrada que pueden hallar justamente debajo, y que con su generosidad habitual me permite reproducir para solaz e información de quien guste leer:

* * *

Supongo, Rafael, que te enteraste de los estudios sobre los ríos europeos (en España sólo lo hicieron sobre el Ebro). Resultó que contenian y daban a beber buenas concentraciones de antidepresivos, calmantes y hormonas femeninas. Las hormonas, a causa de que la píldora es la cosa más usada.
Las substancias esas no son eliminadas en las depuradoras ni por el río y vuelven a llegar a los grifos y no pocas veces se filtran hasta las aguas subterráneas.
O sea, que lo que Zapatero está haciendo, además de darnos pol culo, es caparnos químicamente. Así somos más manejables. Y con las otras substancias evita que la tristeza nos saque de quicio.
No es una broma el hecho de que las mujeres conciban menos y que los hombres tengamos espermatozoides de menor calidad: afeminados los tíos. Con algo de tiempo les empezará a pasar también a los moros y al freir será el reir.
Me pregunto qué harían ahora los mustafás si supieran lo que les está pasando a las gónadas morunas. Y los españoles de poco pelaje, de los que votan Psoe, porque es el partido de los pobres y de los maricones y, además, de los castrados.
Y esto, que salió en diferentes informaciones oficiales de la Unión E, lo tienen que saber nuestros gobernantes, que nada dicen y seguro que nada hacen. El pueblo drogado y el hombre semicapado son elementales para la democracia ladrona e inerte.
No sería mala idea insistir en la cosa de los huevos mortecinos que Zapatero ha de saber. O sea, está por la fabricación de hombres con menos empuje. Si hasta los catalanes no son los mismos. Casi ni tiran objetos contundentes en su 11 de Septiembre. ;) Democracia química. No parece mal a los tiranos.
Y palabra que es cierto lo de la química fluvial. Imagina, desde Madrid p' abajo, cómo llegará a estar el Tajo.
Arturo.

SOBRE LA CASTRACIÓN.

La -química, evidentemente- que la consejera de Justicia de la Generalidad de Cataluña propone como solución a los delitos de violadores reincidentes, paidófilos y otro ganado similar.
Lo siento por doña Sonsoles, pero díganme si don José Luis Rodríguez, que tanto tiempo lleva dándonos por culo, no es un firme candidato al tratamiento.

SOBRE LAS PRIMERISIMAS NECESIDADES DE LA SEÑORA SALGADO.

Ministra, como alguno de ustedes quizá sepa, de Economía y Hacienda o algo así, y ayer portavoz del Gobierno por gracia de los intestinos de doña María Teresa.
En tales funciones -¿o funcionas?- de portavoz -o portavoza-, aseguró que el Gobierno no va a subir el IVA superreducido, que es el aplicado a los productos de primerísima necesidad, tales que el pan, las frutas, las hortalizas, y la leche. Eso, la leche.
¡Loado sea Dios!, exclamarán los bobos, los gilipollas y los socialistas, alegrándose de que los impuestos que suban sean, por ejemplo, los de los combustibles. Eso, que se jodan los ricos, que son los que van en coche.
Obvian el pequeño detalle de que el pan, las frutas y la leche hay que transportarlas, y si se encarece el combustible se encarece el transporte. El de las lechugas y el del parado que se desplaza en autobús.
Pero de esto no se darán cuenta los bobos, los gilipollas y los socialistas -los tres o cuatro que no tengan coche oficial-, porque son de los que piensan que el pan ya sale hecho en una maceta de la panadería; que las frutas y hortalizas nacen por generación espontánea en las fruterías, y que es en las estanterías del supermercado donde se produce la leche.
Eso, la leche.

Publicidad: