Existe, al parecer -porque tiene que haber de todo- una Plataforma contra la impunidad del Franquismo.
Esta plataforma -cuenta Público casi en éxtasis- va a presentar ante el Ayuntamiento de Madrid una propuesta formal para la retirada de todo símbolo franquista de las calles de la Capital.
Y se refieren en concreto a las placas que recuerdan quien hizo cientos de miles de viviendas, en condiciones realmente favorables. Vamos, la chorrada de la Vivienda de Protección Oficial de ahora, pero en serio. Y a lo grande.
Debe ser duro, para los gilipollas, que cada vistazo a los edificios de viviendas -que pese a los años permanecen incólumes, no como las promociones actuales- les recuerde qué régimen fue el que dio a tantísimos españoles un techo digno y asequible.
Eso es lo que deben proponer estos plataformos: la retirada de los edificios de viviendas que hizo la dictadura -ahí debajo tienen algunas fotos-, y no sólo las placas del Instituto Nacional de la Vivienda, de tan grato recuerdo para los bien nacidos.
Que se lo propongan a los beneficiarios, y que reciban la espuerta de collejas como si fueran hombres.
¿A que no hay?