Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

martes, 26 de enero de 2010

SOBRE LA FLEXIBILIDAD DEL FMI.

O, por mejor decir, la inflexibilidad con que expelen estos idiotas las mismas recetas. Porque -lo dice 20 Minutos- el FMI ha pedido a España flexibilidad en los salarios para reanudar el empleo y mejorar la competitividad.

Que yo sepa, los hijoputas del FMI y similares conciliábulos ultracapitalistas no se han flexibilizado el salario, ni han dicho esta jeta es mía sobre las comisiones bancarias, que subieron el pasado año un 6%, ni han abierto las fauces a propósito de los 254 asesores directos del señor Rodríguez (674 en total), que hay que ser gilipollas para necesitar tanto asesor y aún así hacerlo tan mal.

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