Que hoy no puede ser otra que la de los siete golitos de Alemania a Brasil.
No se preocupen, que no voy a hablar de fútbol. Entre otras cosas, porque ni entiendo, ni vi el partido, ni me he enterado del resultado hasta esta mañana.
Lo único que quería decir, es que la culpa, sin duda, es de Sergio Ramos y de Casillas.