Y que es -lo diré desde el principio y por derecho, para tranquilidad de amigos y fastidio de enemigos- un olvido.
El olvido de la fecha del 12 de Octubre como aniversario de la muerte de mi maestro, camarada, amigo, Rafael García Serrano.
Podría aducir que no ando muy centrado en el calendario, y que este año -entre otras cosas por la personal circunstancia familiar que mis amigos y camaradas conocen- el tiempo se me escurre entre los días que me pasan sin darme cuenta.
Pero sería vana excusa, así como la de afirmar que -por exceso de confianza- no tengo incluida esta fecha en mi agenda, confiando -erróneamente, como se ve- en que semejante día no se me iba a pasar nunca. Valga, si acaso, el hecho de que este año estoy, en este mes de Octubre, disfrutando las vacaciones veraniegas, y que los días se me hacen iguales, sin saber cual es lunes o jueves.
Perdónenme ustedes, amigos. Y perdóname tu, maestro, desde los luceros.
2 comentarios:
Mira que me extrañó......
Los siglos, que no perdonan...
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