Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

domingo, 28 de abril de 2019

SOBRE MI VOTO.




Y tenga en cuenta, señor fiscal, 
que el secreto del voto es un derecho
no un deber.




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