El del señor Otegui -ya, ya se que no lo es; pero yo si intento serlo, y debo darle el tratamiento que corresponde incluso a este tipo de alimaña- se ha mostrado arrepentido de que lo de sus amigos y compinches de ETA hicieron durante tantos años.
Para corresponder, en El Correo de España incluyo una lista de las cosas de que me arrepiento. Y de las que me seguiré arrepintiendo, a poco que haya lugar.