Pero piense el Gobierno que si España se le va de entre las manos, no podrá escudarse tras de una excusable negligencia. Cuando la negligencia llega a ciertos límites y compromete ciertas cosas sagradas, ya se llama traición.

José Antonio Primo de Rivera.
(F.E., núm. 15, 19 de julio de 1934)

sábado, 1 de agosto de 2009

SOBRE LA SOLUCION.

Nada más que un breve apunte, simplemente para recomendar el artículo de mi camarada Ismael Medina, en Vistazoalaprensa.com, titulado Los terroristas deben persuadirse de que pueden morir.
Como es habitual, no tiene desperdicio.

Publicidad: