Páginas

lunes, 23 de agosto de 2010

SOBRE LA "MARCHA ESPONTANEA".

Porque así -marcha espontánea- define El Imparcial la algarada de "radicales" -o sea, ultraizquierdistas- del sábado en Barcelona, cuando se pasaron por el arco de los mossos la prohibición judicial de homenajear a la etarra Laura Riera.
Entiendo que el verano es muy malo para el trabajo, y que el panfletillo ansoniano deberá recurrir a becarios de segunda para mantenerse. Pero, hombre, pongan por lo menos a uno que sepa buscar en el diccionario y aplicar lo leído.
Llamar radicales o independentistas, o jóvenes, a los micos de siempre, es una gilipollez. Costumbre habitual de los plumíferos, pero gilipollez. Pero llamar espontánea a una manifestación que lleva semanas anunciada y días prohibida es, como poco, de una incultura y una necedad que deberían ser incompatibles con trabajar en un periódico.

2 comentarios:

  1. NO EXISTE NINGUNA "MARCHA ESPONTÁNEA"... TODAS ESTÁN MUY BIEN ORGANIZADAS Y TAMBIÉN "SUBVENCIONADAS", CON "ESE DINERO QUE NO ES DE NADIE", QUE DECÍA LA CALVO.

    ResponderEliminar

Puedes dejar un comentario de forma totalmente libre. No será censurado ni revisado. Acaso sí sea respondido, en el mismo tono que tu emplees.